jueves, 31 de julio de 2008

Es gatorade señorita, gatorade!

El mensaje es bueno, creo que así somos o así estamos!
La del médico me gustó, bueh! me gustaron las tres! No pude elegir acá van:










Lo vi acá

jueves, 17 de julio de 2008

Cobos dijo no: Son tan lindos a veces!

"que la historia me juzgue" se me equivoco pido perdón!
Y ahora? los mendocinos que hablaban mal del vice ? Que van a hacer?
Que grande el Vice, que huevos!!!! En algo tienen razón, este tipo no es radical!
Me hizo feliz por un ratito

viernes, 11 de julio de 2008

Con las botas puestas!

- Escúchame bien, “Si estás elegante no estás cómoda”, no te olvides nunca de esto. Decía mi hermana la mañana que decidí comprar unas botas.
- Bueno, pero prefiero estar cómoda y no tan elegante. Le insistía, mientras entrabamos a la zapatería
-Eso no es posible. Ahí viene la vendedora. Le vamos a pedir unas botas bien altas porque esos zapatos que usas no dan más
-Ok voy a seguir tu consejo.
-Hola buenos días, que están buscando?
-Ehhh mi hermana… no mejor dicho, yo quiero unas botasss… no sé algo ¿lindo? pregunté nerviosa, como si alguien me estuviese tomando examen
-Necesita unas botas con un buen taco, bien elegante, que parezca una mujer que pisa fuerte, que digan ¡acá viene: esa es! Sentenció mi hermana, que a esas alturas parecía mi madre
-Entiendo, dijo un poco confundida la vendedora, te muestro varios modelos y vos elegís
Y así elegí unas botas que a mi hermana le encantaron. Todas de cuero, negras, altas y con un “buen taco” por supuesto.
Ese día no me animé a usarlas, me las probé, en un improvisado desfile donde mi hermanita junto a mamá susurraban frases como
- Y sí, ahora sí, es otra cosa…
-Que hermosas le quedan! y ella que no quiere usar nada de esto.
Luego las guardé, prometiendo usarla lo antes posible. Siempre y cuando fuese un momento especial, donde brillar con altura toda mi distinción.
Estaba segura que no asumiría tanta elegancia, las usé un par de veces. Las guardé en el placard, donde mi cobardía, impidió volver a sacarlas.
Nunca más pasó nada especial para que mostrara las botas.
Cuando visitaba a mi madre o mi hermana me preguntaban
¿Y..? ¿Qué pasó con las botas que no te las vimos más?
No… si las uso, es que son tan lindas y finas que no me las voy a poner para venir acá?

Cuando sacaba otros zapatos, aparecerían como recordándome que ahí estaban, pero yo… nada. Indiferente, a su elegancia, a su brillo, a su… taco.
Ha pasado largo tiempo y ahora están delante de mí, vienen del zapatero, es su tercer cambio. Primero fue el taco, era muy delgado y la culpa la tenía esa chatura que hacía tambalear cualquier momento.
Lo cambié por un taco gordo, seguro, fuerte. Pero no fue suficiente, ya que había crecido de ancho pero seguía alto, muy alto.
Mis botas y yo compartimos la última oportunidad: Y es que le pedí al zapatero bajarlas un poco. Unos centímetros menos de elegancia. Este es el final, porque llevo invertido varios pesos en sus mutaciones. Y no sé si podré seguir.
Quiero usarlas, subirme a ellas, caminar fuerte, segura y en un momento especial, llamar a mi hermana, para contarle que la elegancia debilitó mi economía y que me haría sentir muy cómoda regalarle mis botas.

viernes, 4 de julio de 2008

Al que madruga...!

Siete de la mañana. Se prende la radio. Comienza un programa. La música te duerme más. ¿Porque nadie trata bien al que madruga? No ponen buena música. Nada de eso. 7:12. El primer pronóstico que escucho; no, mentira, nunca lo escucho. Sigo, sueño, duermo. 7:25. No puedo más: tengo que hacerlo. Me levanto. 7:38. Dejo la radio. Voy a la cocina. Pongo el agua. Preparo el desayuno. 7:45. No tengo radio, en la cocina no. Prendo la tele. 7:48. Lo saludan, él ríe, ella también ríe. Su risa no es “televisiva”. La risa de la mujer suena a la de una bruja de los cuentos. Nunca imaginé una bruja tan temprano. No quiero que se ría más. Hace mal. Hace daño.
Aparece su voz. Él no está ahí. No puedo verlo. Puedo sentirlo. Es algo físico. Es impotencia. No, ya lo sé, es impunidad. Siento que es impune lo que hace. Lo escucho. Trato de darle y darme una oportunidad. Una más. Un día más. Pero se dificulta. Comienza su función. Está lejos. Me dice que hoy va hacer frío. Comenta lo que ve por una computadora. Ve mi cielo. Está nublado. No se ve la montaña. Ha nevado. No puedo más. Corro la cortina. Veo el cielo. Se está despejando. Salgo a la calle. Veo la montaña. Es cierto. Ha nevado. ¿Cómo creerle? ¿Para qué creerle? Si yo siento el frío. Él no. Si veo la montaña. El no. Si a la tarde hace calor. Lo sabré. Él no.
Se vuelve interminable. Los minutos no pasan más. Sigue la función. Tiene cómplices. La gente. Algunos piden que lo salude. Sonrío. Es raro. Alguien lo está disfrutando. Alguien sonríe pero de felicidad. Hoy, él le dedicó el pronóstico del tiempo a alguien. Es demasiado. Dedicar el pronóstico. Con nombre y apellido. El saludo se hace más fuerte si hay un cumpleaños. Vuelvo a sonreír. Pienso en escribir. Pienso en desquitarme. Con una masa. Es violento. No soy así. Ya sé lo que tengo que hacer. Tengo que decir su nombre. Me cuesta. Pero aunque sea una vez. Darle nombre a lo que pasa. Pensar que hay un responsable. Y es él. Es Pedro.

jueves, 3 de julio de 2008

Decálogo de un chica especial (parte 2)

1- Nunca van a gimnasios. No les importa la moda
2- No se casan y menos tienen hijos
3- Analizan todo, desde porque estamos en este mundo hasta porque Juan, el pintor, pinta paredes y no cuadros.
4- Se han leído todo lo que está escrito en este mundo, constantemente citan frases y autores (tienen mucha teoría encima)
5- Están siempre en los Talleres literarios, cuando lo terminan, vuelven a inscribirse.
6- Son muy seductoras al hablar, parecen locutoras de un programa de FM de la noche.
7- Generalmente le sobran algunos kilos… varios
8- Para ellas los hombres son descartables
9- Les encanta las ruanas, vestidos hindúes y los sahumerios
10- Creen que la vida es una “Odisea”

miércoles, 2 de julio de 2008

Decálogo de una chica especial (Parte 1)

1- El gimnasio está siempre primero. No hay reunión, ni fríos, ni acontecimientos que le haga suspender la clase. Nunca lo llaman gimnasios. Es pilates, o gym .
2- Hacerse las lolas para “ser aceptada socialmente”
3- Tener o haber tenido un novio deportista, rugbier es lo ideal , (siempre es bueno estar con alguien que piensa menos que ellas)
4- Están las 24 horas con el celular mandando mensajes, y a la vez hacen otras cosas como: dormir, pintarse, comer, bailar y…no hay etc.)
5- Escuchan a Ricardo Arjona y se preguntan ¿ cómo es qué este guatemalteco, un divino obvio, las conoce tanto?. ¿Donde fue qué se lo presentaron?
6- Para ellas un desfile de modas es un día que merece ser vivido.
7- Son atrevidas y se visten con colores llamativos, así botas, carteras, anillos, reloj, aros, uñas, labios y vincha son del mismo color.
8- Se reúnen con amigas un día a la semana y lloran toda la noche porque, Tommy , el perro llamado igual que su ex, se murió.
9- El pelo, preferentemente rubias, sino negro azabache. No hay medias tintas
10- Creen que no hay vida fuera de los Countries.